Nos regalaban una rosa, como ese día que veníamos con Yew y len, la tuya tenía más espinas te reías de ello, después, te fuiste ... No se por que, cuando yo iba caminado comenzó a llover alguien me tiraba, no se quien, perdía mi rosa y cuando la encontraba la apretaba llorando fue raro, después me di cuenta que se despintaba ahora era blanca... No me dio buena espina... Flores blancas sólo para los muertos.
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